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Preguntas frecuentes

¿Qué es Dios?

Para el Espiritismo, Dios es la inteligencia suprema, causa primera de todas las cosas. La idea de Dios es innata y no depende de una educación religiosa. Por el trabajo en el bien, el hombre aprende a servir a Dios y a Él se acerca. Debemos amar, no temer a Dios.

¿Qué son los Espíritus?

En síntesis, el Espíritu es el principio inteligente del universo. Es la individualización de este principio, creado simple e ignorante, y que va evolucionando mediante varias reencarnaciones.

¿Qué es la Doctrina Espírita?

Es una doctrina filosófica y científica con consecuencias morales.  Comprueba la existencia del Espíritu, la reencarnación, la comunicabilidad con los espíritus, la vida en otros mundos, entre otras cosas. Surgió en Francia, en 1857, con la publicación de El Libro de los Espíritus, que fue el primero de los libros codificados por Allan Kardec y que constituyen las obras básicas (El Libro de los Espíritus, El Libro de los Médiums, El Evangelio según el Espiritismo, El cielo y el infierno, La Génesis y Obras póstumas).

¿Qué es una Doctrina?

La RAE  lo define como siendo: “ 1. f. Enseñanza que se da para instrucción de alguien. 2. f. Norma científica, paradigma. 3. f. Conjunto de ideas u opiniones religiosas, filosóficas, políticas, etc., sustentadas por una persona o grupo. Doctrina cristiana, tomista, socialista.”

Disponible en: https://dle.rae.es/doctrina. Consultado el 01/05/2022.

Tengo cierta sensibilidad con el mundo espiritual. ¿Soy médium?

El médium es el intermediario entre los Espíritus encarnados y los desencarnados. Toda persona que percibe en mayor o menor grado los Espíritus desencarnados, son médiums. Pero la mediumnidad se presenta de muchos tipos y diferentes grados no siendo una experiencia igual que la otra ya que es una facultad individual.

¿Cómo desarrollar mi mediumnidad?

Sugerimos que sea mediante el estudio comprometido y continuado de la Doctrina Espírita en un centro espírita serio que te pueda orientar correctamente en este aspecto.

¿Los Espíritus pueden intervenir en mi vida?

Kardec hizo esta pregunta a los Espíritus y la respuesta la podemos encontrar en la pregunta 459 de El Libro de los Espíritus: “(...) su influencia es mayor de lo que creéis; porque a menudo son ellos quienes os dirigen.”

¿La acción de los Espíritus puede interferir negativamente en mi estado de ánimo o en mi salud física?

Podría darse el caso. Lo contrario también se da, pudiendo los Buenos Espíritus asistirnos en momentos de necesidad.  Por lo tanto, la manera más eficaz de evitar esta acción negativa  es mantener el pensamiento elevado, buscando la sintonía con los Espíritus superiores que siempre están dispuestos a ayudarnos cuando sea posible. Esto se suele conseguir mediante la oración, los buenos pensamientos y la lectura edificante.

He perdido un ser querido. ¿Volveré a verlo?

Seguramente. La separación es momentánea. Los verdaderos vínculos de amor no se disuelven con el tiempo y la reencarnación los fortalece.

¿Existe el destino?

Habitualmente se habla del destino como una fatalidad. Algo a lo que estamos en cierto modo obligados a pasar. Cuando Kardec define a la fatalidad nos dice que el libre albedrío existe para el Espíritu tanto en estado errante cuando elige el género de sus pruebas en su siguiente encarnación, como cuando esté ya encarnado,  y que “No hay fatal sino el instante de la muerte, pues hasta el modo de morir, es una consecuencia del género de pruebas elegido.”


De ahí podemos deducir que hay ciertas cosas por las que estamos más propensos a pasarlas debido a nuestras decisiones anteriores, no siendo esto una imposición, sino una consecuencia de nuestra responsabilidad según nuestro grado de moralidad. 

¿Qué es la reencarnación?

“Es el retorno del Espíritu a la vida corporal. La reencarnación puede tener lugar inmediatamente después de la muerte o pasado un tiempo más o menos largo, durante el cual, el Espíritu está errante; y puede reencarnarse en la Tierra o en otras esferas, pero siempre en un cuerpo humano, y no en el de un animal. 


La reencarnación es progresiva o estacionaria; nunca retrógrada. En las nuevas existencias corporales, el Espíritu puede descender en posición social, pero no como Espíritu; lo que equivale a decir que de señor puede descender a servidor, de príncipe a obrero manual, de rico a pordiosero, lo que no impide que siga progresando en ciencia y en moralidad. De este modo, el perverso puede convertirse en santo, pero no el santo en hombre perverso.”


Allan Kardec. Manual Práctico de las Manifestaciones Espiritistas. Cap. Vocabulario Espiritista: Reencarnación.

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